Una de las razones por las que decidí irme a vivir al centro de San José, era evitar a toda costa a los autobuseros de este país. No por una cuestión personal por supuesto, sino por una cuestión de dignidad. Esperar a veces hasta 40 minutos para que pase el bendito bus es una tomadura de pelo insoportable, y despiadada. Siempre pensaba en lo que podría haber hecho en esos 40 mn.(a eso hay que sumarle la otra media hora, 40 minutos para llegar hasta destino). Impotencia, sensación de no poder hacer nada, desesperación es lo que sentía siempre que esperaba malos ratos, mientras mi voluntad y mi tiempo quedaban a disposición de los transportes públicos.
Por lo tanto en la decisión pesaron dos factores:1- la decisión de que no dependería o evitaría depender en lo posible de los transportes públicos(aunque SI creo en una mejora y fortalecimiento de los transportes, y que es la mejor opción colectiva que puede tomar una ciudad), 2-la decisión de que no iba a comprar un carro(pues no tengo ni el dinero, ni la ganas de ponerme a ahorrar por un carro) y seguir abarrotando los miserables trechos de esta ciudad.
En las dos pesa el factor de ahorrarme enojos en esperas infructuosas, así como una cuestión económica. No quiero darle mi dinero ni a los autobuseros que brindan mal servicio, ni mi dinero a las petroleras. Ojo, que tampoco estoy por la desaparición de los transportes con base en gasolina(aunque hay propuestas de otro tipo de combustibles con fuentes renovables), sino que personalmente si puedo caminar con mis dos piernas, o sacar la bicicleta para moverme entre las presas, y no representa ninguna molestia, mas bien un disfrute, pues la decisión estaba tomada. Así que una menos para los empresarios autobuseros, y disfruto más de la ciudad a pie.
Technorati Tags:
buses, san josé, costa rica, transporte público
No hay comentarios.:
Publicar un comentario